Dos hombres y un destino

 

Meznar estuvo en el sitio oportuno

Acababa el Giro 2023 y en la etapa de las Tres Cimas de Lavaredo, Roglic apenas le había recortado 3" a Thomas, tenía que remontar 26" más en la cronoescalada del penúltimo día en Monte Lussari. Cuando empezaron las durísimas rampas, Primoz Roglic iba recuperando terreno, todo indicaba que si seguía la progresión superaría al galés pero entonces un bache, un cambio de firme, hizo saltar la cadena del esloveno. Su mecánico saltó del coche mientras el propio Roglic encajaba de nuevo los eslabones. Difícil de arrancar en una cuesta tan pronunciada, pero allí apareció un espectador que bajaba por la cuneta derrapando, ansioso por ayudar. Entre él y el mecánico dieron un fuerte empujón a Primoz que se lanzó con gran fortaleza hacia la victoria. Había ganado el Giro por 14" gracias en parte al impulso de aquel espontáneo que, curiosa casualidad, habia venido desde la cercana Eslovenia para verle. Se trataba de Mitja Meznar, que había sido compañero suyo en la selección nacional de saltos de esquí, deporte en el que Roglic llegó a destacar antes de pasarse al ciclismo.