lunes, 29 de enero de 2024

G.P. Lugano, una contrarreloj poco valorada

El danés Ole Ritter, recordman de la hora, ganó dos ediciones

Entre 1950 y 1979 se disputaba en Lugano (Suiza) una contrarreloj de unos 75 km que ponía fin a la temporada, en el mes de octubre. Apenas una decena de corredores eran invitados a participar, sobre todo los grandes especialistas de la época. Ya la primera edición se la anotó Ferdi Kubler y, si repasamos su palmarés, casi todos los grandes han inscrito su nombre en la prueba. Como cabría esperar "monsieur chrono", Jacques Anquetil, fue el más laureado, con 7 victorias.

Sin embargo, a pesar de las victorias de Coppi, Merckx, Baldini, Poulidor, Adorni, Altig, Gimondi, Ocaña, Zoetemelk ...nunca fue reconocida esta contrarreloj como lo fue en su día el G.P. de las Naciones, considerado un auténtico campeonato mundial contrarreloj, cuando éste aún no se celebraba como tal. El G.P. Lugano acabó despareciendo (actualmente hay una carrera en línea amateur con el mismo nombre), y el G.P. de las Naciones ha cambiado de nombre y se ha devaluado notablemente. Ya no se celebran contrarrelojes con estos kilometrajes.

Como curiosidad, el G.P. Lugano fue la última carrera oficial en la que participó Fausto Coppi, tres meses antes de su muerte, siendo 4º en 1959.




 

martes, 23 de enero de 2024

Le Blaireau, la cólera de los dioses

 

"Abriéndose paso"

De principio a fin de su gloriosa carrera, Bernard Hinault fue el auténtico patrón del pelotón. Capaz de movilizar o desmovilizar al resto de compañeros y rivales, decidiendo la actitud en carrera, encabezando protestas o incluso eligiendo a sus sucesores. Solo su presencia ya condicionaba o intimidaba y es que su apodo "Le Blaireau" (el tejón), le encajaba perfectamente. Tal vez el único campeón que ganó no solo por su clase y sus fuerzas, sino también por su carácter.

En 1978 encabezó una huelga de piernas caídas protestando por los horarios que no les dejaban descansar lo suficiente. "si no podemos dormir en el hotel, lo haremos en la carretera". En 1982 unos agricultores cortaron la carretera, El bretón se interesó por el asunto de la protesta, en la que los manifestantes instaban a consumir productos franceses, a lo que Hinault les espetó, acusándoles de cortar la carrera con tractores americanos.

Pero su incidente más espectacular y conocido fue en la París-Niza de 1984, cuando encabezaba un furioso ataque para desbancar a Robert Millar, que era el líder. En plena batalla por el maillot, una nueva manifestación, en este caso de trabajadores de astilleros, bloqueaba la calzada. Hinault trató de pasar sobre su bicicleta pero cuando ya le fue imposible bajó de su máquina y con sus puños siguió despejando el camino. Afortunadamente no hubo heridos. 

                                     Característico gesto de fuerza y rabia, apretando los dientes





domingo, 14 de enero de 2024

El "friki" que desafió a la hora

Graeme Obree "agazapado" en su bicicleta

El récord de la hora que poseía Moser fue todo un despliegue de medios,tecnológicos, tras unos concienzudos estudios físicos y médicos. El trentino con una revolucionaria bicicleta con una enorme rueda trasera por fin batía la marca de Merckx de 1972.

Pero si la bicicleta de Moser llamó la atención por su aerodinámica, su sucesor en la plusmarca de los 60 minutos, Graeme Obree, llamó la atención... por todo. Un cuadro reducido, un manillar minúsculo, muy cercano al sillín e incluso piezas sacadas de una lavadora. Todo ello diseñado y montado por un escocés excéntrico que tenía que adoptar una extraña posición sobre su máquina, muy encogido, donde las rodillas llegaban muy cerca del pecho, que estaba volcado sobre el manillar. Desde luego, de cómodo tenía poco. Sin embargo, el propio Moser, con 42 años y ya retirado y adoptando la "postura Obree" demostró la efectividad de la postura y no anduvo muy lejos de recuperar su récord. De hecho superó su antigua marca.

El caso es que Obree no solo consiguió batir por dos veces el récord de la hora (52,713 km), alternando sus éxitos con el inglés Chris Boardman, de estilo más ortodoxo, sino que fue también dos veces campeón del mundo de persecución (1993 y 1995), batiendo al propio Boardman.

Este ciclista que se avituallaba con bocadillos de mermelada, se dedicó una vez retirado al diseño de bicicletas poco convencionales. Una difícil personalidad le llevó a tres intentos de suicidio, aunque afortunadamente en la actualidad goza de una vida más estable. Su vida ha sido llevada al cine en 2006 en el filme "El escocés volador".
 

martes, 9 de enero de 2024

214 victorias y le tildaban de chuparruedas

 

                                                        Coronándose campeón del mundo


A pesar de competir durante las épocas de dominio de Merckx e Hinault, el holandés Joop Zoetemelk posee un impresionante palmarés, plagado de récords.

Ha sido oro olímpico (con el equipo de su país en los 100 km contrarreloj en México 1968) y oro mundialista en 1985, el más longevo en conseguirlo (38 años y 9 meses), además de ganar el Tour de 1980 y la Vuelta en 1979. En el Tour posee varios récords absolutos: es junto con Sylvaine Chavanel, el ciclista que más veces acabó (16, en todos los que participó); fue quien más distancia cubrió durante la carrera (62880 km); quien más top10 consiguió, 12 (realmente top8, quedando 11 veces entre los cinco primeros, con 6 segundos puestos). Se anotó 10 etapas entre todas sus participaciones.

En 1974 sufrió una grave caída y se fracturó el cráneo, lo que hizo peligrar su carrera, en la que también destacan sus victorias en París-Niza (3), Tirreno-Adriático, Romandía, Flecha Valona, París-Tours (2) y Amstel (con 40 años).

En su debe podemos anotar que no ganó ningún Monumento (solo consiguió algún 4º  o 5º puesto) y que nunca participó en el Giro.

lunes, 1 de enero de 2024

Grandes, pero no en "las grandes".

"Purito" Rodríguez tuvo a su alcance la Vuelta y el Giro

Cuando se repasa la lista de ganadores de las tres grandes vueltas nos sorprenden algunos nombres que estamparon su apellido, cuando hubieron otros que, posiblemente de mayor calidad nunca lo hicieron. Pero Tour, Giro y Vuelta son carreras de tres semanas en las que pueden darse muchas circunstancias que pueden impedir a grandes campeones, quedarse sin algo que, en buena lógica, hubieran tenido que conseguir.
Algunos ejemplos: Eugène Christophe, el hombre que tenía las más inoportunas averías en el Tour; René Vietto, el gran escalador que en su mejor momento tuvo que sacrificarse para su líder; Raphael Geminiani, con calidad de sobra pero siempre con algún rival por encima; Stan Ockers, que también compartió época con ciclistas enormes; Roger Rivière, que vio truncada una fulgurante carrera por una caída; Joaquim Agostinho, al que posiblemente pudo jugarle una mala pasada un cronometraje defectuoso; Gianbattista Baronchelli, el "poulidor" del Giro al que Merckx solo pudo batirle por 12" en 1974; Francesco Casagrande, al que puede ser que le faltara algo de fondo para las tres semanas, pero que vio como ganaban el Giro en su época otros italianos con menos clase que él; Joaquim Rodríguez, que tuvo muy cerca tanto la Vuelta como el Giro y al que penalizó mucho su deficiente lucha contra el crono; Claudio Chiappucci, que estaba claramente por debajo de monstruos de su época como Indurain, Bugno o Rominger pero que hubiera merecido la victoria por su tesón... 
Y seguramente algunos más.

 
Gianbattista Baronchelli