De amarillo en el Tour de 1999
Jaan Kirsipuu ha sido el ciclista estonio de referencia. Durante su dilatada carrera profesional, casi siempre ligada a equipos franceses, consiguió 125 victorias. Gran velocista, capaz de medirse con los mejores sprinters de la época en sus mejores temporadas o ganando al aprovechar su potencia atacando cerca de meta. Su mayor notoriedad la alcanzó en 1999 donde ganó una etapa en el Tour y portó el maillot amarillo de líder durante varias jornadas.
Ganó además otras tres etapas de la Grand Boucle en otras ediciones, una etapa en la Vuelta, dos en la París-Niza, la clásica París-Bourges, Tour de l'Oise, La Vendée, Denain... y decenas de carreras y etapas de segundo orden, pero si por algo puede entrar en el anecdotario del ciclismo no es por su extensa cosecha de triunfos.
Estuvo en la salida del Tour en 12 ocasiones, 2 veces en la de la Vuelta y una en la del Giro, pero ninguna de las 15 las finalizó. Es difícil contrastar el dato con ediciones del siglo pasado pero sería muy extraño encontrar a otro ciclista con semejante récord.
No obstante, anecdotario aparte, no cabe duda que hasta la fecha no ha dado Estonia un ciclista como él, con ni más ni menos que 14 títulos nacionales (5 en ruta y 9 en contrarreloj).








